En estas últimas cuatro décadas la sociedad argentina ha sido blanco de las más crueles y feroces estrategias de represión. La enumeración nunca deja de ser vital, porque de este modo los crímenes más aberrantes seguirán gestando perceptibles huellas en la memoria del pueblo.
RECORDEMOS
· A LOS más de 600 militantes populares asesinados por la triple AAA;
· A LOS 30.000 compañeros detenidos desaparecidos durante los años del terrorismo de estado;
· A José Luis Cabezas, fotógrafo asesinado durante el menemismo;
· A LOS 85 muertos en el atentado de la sede central de la AMIA, durante el menemismo;
· A Gustavo Benedetto, Alberto Márquez, Carlos Almirón, Diego Lamagna, Gastón Rivas que encabezan la lista de 32 asesinados por la Policía Federal, cuando cobardemente Fernando de La Rúa salió huyendo en helicóptero de la Casa Rosada;
· A LOS piqueteros Maximiliano Kosteki, Darío Santillán, asesinados en la corta presidencia de Duhalde;
· A Miguel Bru, Sebastián Bordón, Ezequiel Demonty, Luciano Nahuel Arruga, entre otros nombres, los jóvenes secuestrados, asesinados y desaparecidos en democracias y bajo las manos criminales de las policías provinciales. Por las calles de nuestras ciudades esta mano de obra represiva ha implantado una verdadera pena de muerte extra-legal;
· AL maestro Carlos Fuentealba cuando una bala a quemarropa a manos de un policía torturador le cegó la vida, siendo entonces gobernador el neuquino Sobisch;
· A JORGE JULIO LÓPEZ, testigo en el juicio contra Etchecolatz, secuestrado y desaparecido en el gobierno kirchnerista. Su nombre es emblemático, porque en él se amalgaman todos los demás nombres, por él testimonian los asesinados por la triple AAA, los 30.000 compañeros detenidos, desaparecidos y también los manifestantes del jueves negro de diciembre de 2001, los piqueteros de puente Pueyrredón, los jóvenes de nuestros barrios más pobres, los masacrados por los cobardes atentados.
Al secuestro y desaparición de nuestro compañero Jorge Julio López le ha seguido una seguidilla de amenazas e intimidaciones contra los testigos en los juicios por crímenes de lesa humanidad. La firme determinación de estos compañeros es un ejemplo de dignidad y valentía. Todos y cada uno de ellos han sufrido en carne propia las consecuencias de la indiferencia ciudadana, es por ello que siguen con su voluntad inquebrantable al dar su testimonio para condenar a estos genocidas.
HOY, SUBRAYAMOS las amenazas e intimidaciones contra los luchadores populares, en particular contra los militantes del Movimiento Nacional de los Chicos del Pueblo, quienes se han movilizado para reclamar por el hambre que golpea con dureza a amplios sectores de la población argentina.
La criminalización de la protesta social, así como la iniciativa solicitada por aquellos miembros recalcitrantes de la sociedad argentina de bajar la edad de imputabilidad de los menores, representan soluciones cuyo origen se remonta a las estrategias represivas empleadas por el terrorismo de estado.
En todos estos casos antes enumerados han actuado impunemente miembros de los grupos de tareas, los cuales siguen operativos. No ha habido firmeza, ni determinación ni en el gobierno Nacional, ni en los gobiernos provinciales para desmantelar la estructura que, desde hace décadas, enquistan a los organismos de seguridad del estado. Policías provinciales, Gendarmería Nacional, Policía Federal Argentina, las tres armas de las FFAA, y ahora la nueva policía que pretende crear Mauricio Macri en la Ciudad Autónoma de Baires, están contaminadas por estos grupos que actúan con total impunidad.
Como ha sido siempre nuestra manera de actuar, hemos apelado a todos las redes de comunicación posibles con los poderes públicos para que den prontas respuestas a los atropellos, amenazas, intimidaciones, así como a los asesinatos y desapariciones sin resolver y lo único que hemos obtenido ha sido un largo y profundo silencio. Es por ello que, hoy, convocamos a toda la sociedad a movilizarse para enfrentar con firmeza y total determinación la lacra que representa para nuestra seguridad personal y colectiva la permanencia de estos criminales que siguen operando dentro de los organismos de seguridad nacional.
repetimos:
· ¡BASTA DE ESTA IMPUNIDAD QUE PONE EN ENTREDICHO A LA JUSTICIA!
Exigimos:
· UNA EXHAUSTIVA INVESTIGACIÓN PARA IDENTIFICAR Y JUZGAR A LOS RESPONSABLES DE LAS AMENAZAS E INTIMIDACIONES CONTRA LOS MILITANTES DEL MOVIMIENTO NACIONAL DE LOS CHICOS DEL PUEBLO
Herman@s de Desaparecidos por la Verdad y la Justicia
No olvidamos
No perdonamos
No nos reconciliamos
¡Aparición con vida de Jorge Julio López!
30.001 compañeros detenidos desaparecidos
¡PRESENTES!
Para comunicarse con nosotr@s: treintamilhermanos@ yahoo.com. ar
(011) 15-31548953
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